Mentes Digitales, un programa que durante un año impactó a niñas y adolescentes en situación de vulnerabilidad.

La iniciativa, desarrollada por el sector empresarial, académico y social, evidenció cómo la tecnología y la educación pueden generar oportunidades reales de inclusión y desarrollo en contextos vulnerables.

En una alianza entre Growth Acceleration Partners (GAP), la Fundación La Divina Providencia y la Universidad de Antioquia, se realizó la clausura oficial del programa Mentes Digitales, una iniciativa de alto impacto social que durante 12 meses brindó formación integral en habilidades digitales, socioemocionales y de emprendimiento a niñas, adolescentes y madres menores de edad en proceso de restablecimiento de derechos, presentando resultados que evidencian su aporte a la inclusión, la equidad y el desarrollo de oportunidades desde la tecnología.

Durante 12 meses, Mentes Digitales desarrolló una ruta formativa integral que combinó educación digital, fortalecimiento de habilidades socioemocionales y formación para el emprendimiento, impactando positivamente la vida de niñas, adolescentes y madres menores de edad en proceso de restablecimiento de derechos, quienes enfrentan múltiples barreras sociales, económicas y educativas.
La iniciativa nació como respuesta a una urgencia social, con el objetivo de cerrar brechas de acceso al conocimiento, promover la igualdad de oportunidades y generar condiciones reales para la construcción de proyectos de vida dignos y sostenibles, apoyados en el uso consciente de la tecnología.

“Mentes Digitales es más que un proyecto: es una puerta abierta hacia la dignidad, la educación y los sueños de niñas y adolescentes que han enfrentado múltiples formas de vulneración”, afirmó Angelina Chálela, gerente del proyecto, Fundadora y Senior Manager LATAM – Finance and Corporate Social Responsibility de Growth Acceleration Partners (GAP).
La articulación entre el sector social, académico y empresarial fue un pilar fundamental del programa. Growth Acceleration Partners (GAP) aportó su experiencia en tecnología e innovación con enfoque humano; la Universidad de Antioquia fortaleció especialmente los procesos de habilidades blandas y formación integral; y la Fundación La Divina Providencia acompañó de manera permanente a las participantes, garantizando un entorno de cuidado, confianza y seguimiento.